A las afueras del pueblo, en una casa tradicional, Aicha, una mujer de 26 años lleva un estilo de vida monótono.
Durante el día, hace las tareas del hogar y cuida a su anciana madre, que está enferma y postrada en cama. Por la noche, Aicha se va
a casa y esperando cruzar el camino de un posible camionero.